Dios es más grande que Goliat - Pastor Andrés Corson - 12 Febrero 2014

David escribió el Salmo 9, probablemente lo hizo después de derrotar a Goliat. Es un Salmo de celebración por la muerte de su enemigo.

Pero, ¿cómo aprendió David a componer salmos? Es posible que David conociera los versos de Moisés que aparecen en Éxodo 15, y los usó como inspiración para componer el Salmo 9.

La Biblia dice que David metió 5 piedras lisas en su bolsa para derrotar al gigante. Pero las piedras que David usó para enfrentarse a Goliat no eran carnales sino espirituales, como dice en 2 Corintios 10:4.

¿Cuáles eran esas 5 piedras?

1. El nombre de Dios: David dijo, Tú vienes contra mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo contra ti en nombre del Señor de los Ejércitos Celestiales, el Dios de los ejércitos de Israel, a quien tú has desafiado. 1 Samuel 17:45 (NTV). La victoria no estaba en las piedras sino en el nombre del Señor.

2. Su fe en Dios: David conocía a Dios: El Señor, que me libró de las garras del león y del oso, también me librará del poder de ese filisteo. 1 Samuel 17:37 (NVI). ¿Conoces al Dios en el que has creído? ¿Sabes cómo es él?

3. Su visión: David vio el final de la historia antes de que ocurriera, tuvo visión y en ella Dios ganaba. David enfrentó una batalla que había ganado desde antes de pelear.

4. Su confesión de fe: David unió lo que creía con lo que expresaba con su boca.

5. El poder de su alabanza: David conocía el poder de dar gracias en toda situación.

En el Salmo 9 vemos que David menciona aspectos que para Dios son importantes:

1. Nuestra pasión: el Salmo 9 dice: Quiero alabarte, Señor, con todo el corazón. Marcos 12:30 dice: Ama al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas (NVI). Dios quiere personas que lo amen sin condición.

2. El mensaje: el Salmo 9 dice: quiero contar tus maravillas. ¿Cuál es el mensaje de tu vida? ¿Es de alabanza o de crítica? Debemos tomar responsabilidad por lo que decimos. De la abundancia del corazón habla la boca. Mateo 12:34 (NVI).

3. Nuestra actitud: ¿Cuál es nuestra actitud frente a Dios? no se trata de fingir alegría. Nuestras actitudes salen de nuestra mente por eso necesitamos trabajar en ella. Identificar si hay rabia, amargura, y saber perdonar. Renovar nuestra mente y echar fuera los demonios que influencian nuestra vida. “Si tengo algo en contra de Dios, se me va a notar”. Asegura el pastor Andrés.

4. Nuestras alabanzas: David decía: Quiero alegrarme y regocijarme en ti, y cantar salmo a tu nombre, Oh Altísimo. Necesitamos alabar a Dios en todo momento, que él sea nuestra prioridad.

Predicación del 12 Febrero de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por el Pastor Andrés Corson. #SuPresenciaenInternet