Disfrutar la vida mientras trabajamos - Pastor Andrés Corson - 7 Septiembre 2014
Disfrutar la vida mientras trabajamos - Pastor Andrés Corson - 7 Septiembre 2014
Desde el momento en que Dios nos dio la libertad Satanás ha tratado de quitárnosla, por eso, ha querido que creamos que el trabajo en una esclavitud.
Génesis 3:17 dice: “Al hombre le dijo (Dios): «Por cuanto le hiciste caso a tu mujer, y comiste del árbol, el que te prohibí comer, ¡maldita será la tierra por tu culpa! Con penosos trabajos comerás de ella todos los días de tu vida…»". La que está maldita es la tierra no el trabajo.
El trabajo no es una maldición sino una bendición. En Juan 5:17 Jesús dice: “Mi Padre aun hoy está trabajando, y yo también trabajo”. El trabajo es idea de Dios.
Dios trabajó seis días y descansó un solo día, pero a veces hacemos más énfasis en el descanso que en el trabajo.
Con el trabajo, Dios nos da el privilegio de desarrollar nuestros dones. Proverbios 12:24 dice: “El de manos diligentes gobernará; pero el perezoso será subyugado”.
El trabajo es una esclavitud para el que no quiere trabajar, para el perezoso, para el que pierde tiempo, para el que roba, para el que busca atajos hacia la riqueza.
De nada sirve tanto trabajo si no lo disfrutamos y podemos hacerlo porque:
- Es nuestra fuente de ingresos
- Nos permite tener una vida saludable
- Nos mantiene jóvenes
- Nos ayuda a tener una vida significativa
Trabajar también nos lleva a cumplir los 5 propósitos de nuestra vida:
- Adorar: que nuestro trabajo sea siempre para la gloria de Dios. Si trabajamos bien Dios nos recompensará aunque no ganemos mucho.
- Predicar: trabajar de tal manera que la gente quiera conocer al Cristo que habita en nosotros.
- Ser como Jesús: permitir que Dios use las pruebas e injusticias de nuestro trabajo para formarnos.
- Plantarnos en la iglesia: no podemos dejar que el trabajo sea más importante que la iglesia.
- Servir a Dios: usar nuestros dones para que el reino de Dios se extienda.
Muchos no disfrutan su trabajo porque trabajan en lo que les tocó, ¿qué hacer en este caso?
Sí son fieles con lo que Dios puso en sus manos, él va a usar eso para darles los deseos de su corazón; el secreto es fidelidad en lo que les ha tocado.
Predicación del 7 septiembre de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por el Pastor Andrés Corson. #SuPresenciaenInternet