Cercas rotas - Andrés Corson - 5 Julio 2015

Dios puso cercas protectoras en la consciencia de todos, pero el enemigo ha logrado romperlas en algunas personas. Necesitamos saber cuáles son para protegerlas.

Con respecto al sexo la Biblia habla de estos límites:

• La relación sexual es solo para el matrimonio. El sexo tiene que ser protegido por un compromiso que es para toda la vida, matrimonio.
• Un hombre solo puede tener sexo con su esposa. Proverbios 5 dice: “Bebe el agua de tu propio pozo; comparte tu amor únicamente con tu esposa. ¿Para qué derramar por las calles el agua de tus manantiales teniendo sexo con cualquiera? Deben reservarla solo para los dos; jamás la compartan con desconocidos”.
• Límites físicos. Hay ciertos lugares de nuestro cuerpo que no pueden ser tocados, si una persona se aproxima a esas zonas está violando la cerca.
• El divorcio. Aunque Dios ama al divorciado, no es su voluntad. No vamos a condenar al divorciado pero no es una opción. En Mateo 5:32 Jesús dijo: “Un hombre que se divorcia de su esposa, a menos que ella le haya sido infiel, hace que ella cometa adulterio; y el que se casa con una mujer divorciada también comete adulterio”.
• Codiciar a una persona casada. “No codicies la esposa de tu prójimo”, Éxodo 20:17.
• Pornografía. El deseo de ver el cuerpo desnudo de otra persona fue puesto por Dios en nosotros, pero su plan es que ese deseo se realice dentro del matrimonio.
• La Biblia no dice nada sobre la masturbación pero es un vicio y todo lo que genera adicción es pecado, además casi siempre va acompañada de pornografía.
• Homosexualidad. La sociedad actual nos quiere llevar a aceptar esta clase de comportamiento contrario a la voluntad y al diseño de Dios. Creemos lo que Dios dice, por eso amamos a los homosexuales y entendemos que están sintiéndose atraídos a personas del mismo sexo porque alguien violó su cerca.

Dios quiere reconstruir las cercas que están rotas, para eso es necesario:

• • 1. Recibir el regalo de la salvación y creer que en Cristo somos justificados o declarados justos.
    2. Creer que nuestra identidad no lo determina lo que nos hicieron ni cómo nos sentimos o lo que hemos hecho, sino lo que somos en Cristo.
    3. Permitir que Jesús entre a las diferentes situaciones en donde se rompió la cerca y traiga sanidad.
    4. Dejar que Dios vuelva a construir esa cerca.

Una vez se haya restaurado la cerca es necesario poner límites.

Predicación del 5 Julio de 2015 en el auditorio de la iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por el Pastor Andrés Corson. #SuPresenciaenInternet