Marco Romero, pastor de El Lugar de Su Presencia en Plano Texas, comparte un mensaje basado en dos versículos bíblicos. Juan 3: 16-17 y Mateo 13: 7-14 que expresa: ancho es el camino que lleva a la perdición y muchos entran por él. Por el contrario, angosta es la puerta y el camino que lleva a la vida pero pocos entran por ella. Dios no quiere que nadie se pierda, Dios llora a causa del sentimiento de pérdida de quienes van a una eternidad sin él.
El pastor puntualiza en que hay tres clases de perdidos:
- Los perdidos en el infierno: no hay una cifra que pueda cuantificar la cantidad de almas que se pierden, son demasiadas las que van al infierno a diario. Para quienes ellas, ya no hay esperanza.
- Perdidos en el mundo: el mundo está bajo el gobierno del maligno, hay un espíritu de anticristianismo, pero para lo que estamos en este mundo todavía hay esperanza, mientras estemos vivos podremos hallar en Cristo la salvación de nuestras almas.
- Perdidos en la iglesia: muchas veces la iglesia se convierte en un lugar de activismo, una costumbre, profesión; sin darnos cuenta estamos perdidos, dormidos espiritualmente. Dios desea que todos los dormidos despierten y recuerden que Dios ha dicho “todo lo que hay en mi casa es tuyo disfrútalo”.
Finalmente el pastor hace una invitación: “Hay un púlpito movible debajo de tus pies. ¡Predica! NO te avergüences del Evangelio”.
Predicación del 30 Octubre de 2013 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por el Pastor Marco Romero de El Lugar de Su Presencia en Plano Texas.
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