¿Estarías dispuesto a morir por Dios? ¿Cuánto vale Dios para ti?
¿Está él por encima de lo que más aprecias? ¿Es Jesús lo más importante en tu vida?
Para definir nuestras prioridades vale la pena conocer las de Jesús. Lucas 10:20 muestra aquello que para Jesús es lo más importante: “Sin embargo, no se alegren de que puedan someter a los espíritus, sino alégrense de que sus nombres están escritos en el cielo”. Lo más importante para Jesús es que nuestro nombre está escrito en el libro de la vida, es decir que hemos recibido la salvación.
¿Qué es lo más importante en la vida? ¿La salud, el trabajo, los viajes, el dinero, las compras?
Filipenses 3:7,8: muestra cómo las prioridades pueden cambiar, esto le sucedió a Pablo quien dice: “Antes creía que esas cosas eran valiosas, pero ahora considero que no tienen ningún valor debido a lo que Cristo ha hecho. Así es, todo lo demás no vale nada cuando se le compara con el infinito valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por amor a él, he desechado todo lo demás y lo considero basura a fin de ganar a Cristo.”
La escala de valores de Pablo cambio después de conocer a Jesús. Como iglesia, no prohibimos nada porque sabemos que una vez conocemos a Jesús, lo demás deja de ser importante.
En Eclesiastés 2:1, Salomón habla de su escala de valores. Asegura que probó todo lo que puede causar placer al hombre, sin embargo, concluye que nada de esto llenó su vida. Nada de esto tenía sentido.
Entonces agrega: “Pues, ¿quién puede comer o disfrutar de algo separado de él (de Dios)?” Eclesiastés 2:25.
Nuestra vida es completa cuando construimos con Dios.
Lucas 12:21 dice: “Así es, el que almacena riquezas terrenales pero no es rico en su relación con Dios, es un necio”.
Lo que realmente importa es que Dios sea todo en nuestra vida.
Predicación del 11 Mayo de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia – Bogotá – Colombia por Carlos Olmos. #SuPresenciaenInternet