El sueño de Dios está en proceso y en espera pero se va a cumplir a pesar de los años, del tiempo, se va a cumplir.
Parte de este sueño con el Pueblo de Israel es que cada uno de ellos sean sacerdotes, Dios se lo reveló en Éxodo 19:5-6.
Dios llamó a Su pueblo, un pueblo esclavo a vivir como reyes reflejando la presencia de Dios a diario, de hecho ese sueño aun sigue vivo a pesar de que esa misma noche Israel le haya fallado.
La religión nos segmenta, nos divide de la verdadera presencia de Dios.
Dios no está buscando adoración, busca personas, Él busca sacerdotes; 1 de Pedro 2: 5 El sueño continúa pues él lo hizo posible a través de la obra de Jesucristo, Dios quiere tener un pueblo de gente santa que sabe qué es estar en Su presencia adorando al Dios vivo.
Dios nos llama a ser piedras vivas que hacen parte de una estructura más grande llamada Iglesia; Y ustedes son las piedras vivas con las cuales Dios edifica su templo espiritual 1 Pedro 2:5 (NTV). Dios creó adoradores no por la adoración sino para tener comunión con personas, él desea tener una amistad con nosotros pues esto nos beneficia para ser transformados a Su imagen, pues al adorarle nos volvemos sacerdotes para así proclamar Su nombre al mundo que no lo conoce.
¿Qué era esencialmente ser un Sacerdote de Dios?
1. Deuteronomio 10:8 Aprender a llevar el arca del pacto, este ere el artefacto más sagrado que se encontraba en el Lugar santísimo donde Dios hablaba con Moisés y su pueblo. Los levitas, los sacerdotes de la época fueron las personas asignadas de llevar con honor y dignidad lo que representaba la presencia de Dios donde quiera que él les indicará.
Nosotros tenemos el honor y la dignidad de ser portadores de llevar la presencia de Dios a donde quiera que vaya, usted es un agente de cambio, Dios vive en usted. Es su responsabilidad llevar el altar de Dios para donde quiera que usted vaya, es su decisión vivir y procurar la vida con Dios, no pretenda ni dependa de otra persona para estar en Su presencia.
2. Adorar a Dios.
3. Servir: Bendecir al pueblo del Señor como canales e instrumentos de bendición y restauración para otros, todo esto nace de estar en la presencia de Dios.
Si sabemos que somos sacerdotes de Dios, ¿Por qué no vivimos como tal?
Necesitamos…
- Conocer a la única persona que puede hacer de nosotros un adorador del Dios vivo. Solo si lo BUSCO, si me siento a su lado y hablo con Jesús podré ser un sacerdote.
- Tomar decisiones que me acerquen a Dios: Ajustar sus prioridades y darle el primer lugar a su comunión con Dios / radicalidad.
- Tener una relación con el Espíritu Santo.
Predicación del 11 Octubre de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por Danilo Montero. #SuPresenciaenInternet